Trinidad Vagliengo cerró el 2022 dejando la categoría de menores y ya comenzó a incursionar como profesional. Al hacer un balance de su temporada dijo que “mi año deportivo fue muy lindo, ya que de los cinco regionales que jugué gané tres, lo cual me dejó muy contenta. En el plano nacional también muy conforme, pues quedé número 20 en el país, algo que es realmente muy hermoso para mí».
Luego, aseguró que «mi objetivo, siempre, desde que entré a menores fue estar dentro de las mejores 20 del país en alguna de las categorías, lo que pude lograr este año, ya que en años anteriores estuve 30 – 40 y hasta 70 en sub 12, aunque en muchos de esos torneos no competía porque no llegaba. Ahora, ya jugué mi último torneo en esa categoría; a partir de ahora comienzan otro tipo de compromisos en diferentes circuitos que son más complejos».
Al hacer un análisis, sostuvo que «lo más positivo es que pude entrar a la qualy de un torneo profesional, algo que es muy difícil y que pude jugar y demostrar mi buen nivel, aunque no me fue como lo esperaba, pero fue algo normal, por ser mi primer torneo profesional. Considero que el 2022 ha sido muy positivo, donde aprendí lo que es el profesionalismo, de qué manera hay que trabajar, cuántas horas hay que meterle al entrenamiento y qué tipo de trabajo hay que hacer, el cual es muy exigente y realmente me gusta, porque haciendo las cosas bien te lleva a obtener un buen resultado».
Además, contó que «tuve un tiempo de entrenamiento con Bettina Fulco, quien fue una de las mejores jugadoras del mundo (N° 23 del ranking) y de quien aprendí mucho. Mis planes para 2023 son comenzar a estudiar algo de fotografía que es lo que me gusta, aparte del profesorado de tenis, el cual voy a terminar dentro de poco y en lo deportivo, la idea es comenzar a jugar los torneos profesionales y poder sacar algún ranking WTA o profesional, aunque en la Asociación Argentina de Tenis ya tengo profesional. Es muy probable que vaya a estudiar a Río Segundo, Córdoba, que es donde normalmente tengo a mi familia».